Dicen que el blanco es el color oficial del verano, quizá sea porque nos recuerda a islas como Mykonos o Ibiza. Quizá simplemente sea porque nos gusta el contraste que hace en nuestra piel bronceada. Sea como sea, es un color que verano tras verano reina sin parar.
El vestido que os enseño hoy tiene un estilo muy veraniego, desenfadado y cómodo. Es un vestido ideal para ir a la playa, para una tarde de verano o incluso para una cena desenfadada de verano. En resumen, es él vestido blanco de verano!
Lo he comprado en las rebajas y quizá con un poco de suerte lo podéis encontrar en alguna tienda física. Me pareció que el calzado adecuado eran las "espadrilles", enfatizando así este aire de vestido de isla o incluso con un cierto aire campestre.
La próxima temporada el accesorio estrella serán los maxi pendientes, contra más grandes mucho mejor. Triunfarán los de estilo años 90 y con motivos geométricos. Los que llevo hoy combinan el nácar y el dorado y son muy favorecedores. Fáciles de combinar y favorecen prácticamente a todos los tipos de rostro.
Un beso y feliz semana